Los pequeños temblores
que están sacudiendo Oklahoma y el sur de Kansas diariamente aumentan
drásticamente el riesgo de terremotos mayores y más peligrosos, dice un
estudio federal estadounidense.
Científicos vinculan muchos de esos sismos con las inyecciones subterráneas de agua tras exploraciones de gas, un controversial proceso conocido como fracturación hidráulica.
Documentos federales muestran que Oklahoma ha registrado casi 200 temblores que la gente percibió desde el 1 de enero.
El geofísico Williams Ellsworth, del Instituto Geológico de Estados Unidos, dijo que el aumento de esos temblores menores incrementa el riesgo de sismos futuros que pudieran causar severos daños.
El número de temblores menores comenzó a aumentar en el 2008 y entonces se disparó en el 2013 y el 2014.
Ellsworth dice que el riesgo de un sismo de grandes proporciones es aún pequeño con una probabilidad de 1 en 2.500 años, pero es el más alto en el área de las Rocallosas.
Científicos vinculan muchos de esos sismos con las inyecciones subterráneas de agua tras exploraciones de gas, un controversial proceso conocido como fracturación hidráulica.
Documentos federales muestran que Oklahoma ha registrado casi 200 temblores que la gente percibió desde el 1 de enero.
El geofísico Williams Ellsworth, del Instituto Geológico de Estados Unidos, dijo que el aumento de esos temblores menores incrementa el riesgo de sismos futuros que pudieran causar severos daños.
El número de temblores menores comenzó a aumentar en el 2008 y entonces se disparó en el 2013 y el 2014.
Ellsworth dice que el riesgo de un sismo de grandes proporciones es aún pequeño con una probabilidad de 1 en 2.500 años, pero es el más alto en el área de las Rocallosas.
0 comentarios:
Publicar un comentario